Marc y Maria se dieron el sí quiero en el monasterio de Ripoll. Su boda fue cuidada al detalle, personalizando todos los complementos y decoración para los invitados. A pesar de que al final llovió e hizo mal tiempo, no perdieron su sonrisa y sentido del humor. Gracias por dejarnos entrar en vuestro gran día! Que seáis muy felices 🙂